Hace poco tuve una entrevista con el bufete García Nadal & Cía, además de ofrecer rentas poco atractivas, la reclutadora me preguntaba dónde había cursado mis estudios como escolar, afortunadamente y gracias a mis padres pude estudiar en buenas instituciones (no de élite), así que no tenía nada de avergonzarme.
Pero lo petulante de las preguntas elitistas arruina las ganas de obtener algún empleo. Al final terminan ahuyentando el talento.